sábado, 14 de junio de 2008

EN CARTEL: "El incidente", un Shyamalan muy menor

Tras un par de trabajos anteriores que pasaron de puntillas, la mayoría de edad cinematográfica de M. Night Shyamalan le llegó de la mano de un fulminante hit que arrasó en taquilla: “El sexto sentido”, película tramposa donde las haya, con clamorosos fallos de guión, pero que nos descubrió un narrador de historias intenso, con un sentido del suspense y del climax envidiable. Tras ésta llegó su obra más madura e intencionada, “El protegido” en donde son identificables todas las características de su cine. Simbolismo metafórico, el azar como algo discutible y la idea del destino como sino inevitable, trucos visuales y narrativos y, al final, el gran giro de guión que deja a la platea boquiabierta. Además, ofrecía una óptica absolutamente insólita del universo de los superhéroes y del mundo del cómic. En suma, una obra ejemplar que no indiscutible pues no gozó del favor de espectadores acostumbrados a las adaptaciones más ruidosas de los personajes de las novelas gráficas. Ellos se lo perdieron.
Tras “El protegido” llegó “Señales”, un inteligente homenaje a la serie B y una vuelta de tuerca a las obsesiones y particularidades antes apuntadas del cineasta de origen indio, hecho éste (su filosofía hinduista) que marca además definitoriamente el fondo de sus películas. A ésta siguió “El bosque” un alambicado juego de realidades, prodigiosamente rodada y plena de tensión creciente hasta la traca final, pirueta arriesgada pero tragable pues en esos momentos el filme nos había ya subyugado.
Pero como decía en el anterior post, “Señales” y “El bosque” fueron centro de polémica por amantes de lo simple y de la ortodoxia hiperrealista. No obstante, ello no fue nada comparado con el varapalo sufrido por el siguiente trabajo, “La joven del agua”, película menor, excesivamente personal, con la que consiguió enervar definitivamente a críticos del tipo del que aparece en el filme (con el que, dicho sea de paso, el director afincado en Philadelphia se ceba vengativamente). Con estos antecedentes, y tras diversas dificultades para financiar su nueva película, nos llega ahora “El incidente”. De entrada, he de reconocer que en esta ocasión me resulta difícil defender a Shyamalan de ser despellejado, como viene siendo últimamente tradicional. Y es que en sus propias virtudes lleva este realizador su castigo. Y me explico. Si “El incidente” lo hubiese rodado un director novel, sería muy probablemente aplaudido, pues la cinta atesora momentos sobrecogedores, como las distintas escenas de suicidios colectivos (tanto los que se ven, como los que sólo se imaginan); un tratamiento del sonido, como es marca de la casa, ajustadísimo; un maridaje entre imagen y el score de James Newton Howard perfecto; y es intensa puntualmente en la creación del suspense y el miedo ante lo desconocido. Sin embargo, Shyamalan no es un director novel y pese a su confesada devoción por el maestro Hitchcock, se le debe exigir algo más de una suerte de versión ecológica de “Los pájaros”. Y pese a su también obvia admiración por Spielberg, se espera algo más que una mezcla entre “Encuentros en la tercera fase” y “La guerra de los mundos”.
Y es que, este nuevo homenaje a la ciencia ficción de serie B, está realizado solo a ratos con ganas; está lastrado por la imposición como protagonista de una actor como Mark Walberg increíble en su personaje; y parece estar echa a golpes de autoplagios de momentos descartados de otros títulos de su autor, el más obvio, “Señales”.
Evidentemente, no es tiempo perdido y el entretenimiento está garantizado en este filme muy de transición en la carrera de Shyamalan, que menos, pero la sensación además de haber visto ya lo que se cuenta es manifiesta. Quizás habría que preguntarse que hubiera sido de esta cinta sin los recortes y modificaciones de guión impuestos por la productora (incluido supongo ese empalagoso pseudo happy end de los protagonistas). Pero eso es mera especulación. La realidad es que ni siquiera en su mensaje, por obvio, es eficaz el filme. Y es que, personalmente, para películas ecologistas como esta, prefiero el magistral documental “Una verdad incómoda”.

by Harry Callahan

NOTA: 5/10

WEB OFICIAL, DATOS TÉCNICOS Y TRAILER: http://www.thehappeningmovie.com/