miércoles, 10 de agosto de 2011

"SUPER 8": Abrams homenajea al Spielberg de los 80

El secretismo que rodeó el rodaje de “Super 8”, causó el efecto deseado: levantó enormes expectativas acerca de qué de nuevo nos iba a contar su realizador J. J. Abrams. Vista la cinta, nuevo, nuevo, realmente la película no propone nada, más bien todo lo contrario, pues el film nos sumerge de lleno en un revival del cine de los ochenta, o más bien, del cine de aventuras juveniles que tanto prolifero en aquella década y de la que Steven Spielberg (productor a sazón de “Super 8”), fue un gran auspiciador. Es más, la última cinta del creador de la serie “Perdidos” constituye, a poco que se reflexione, un innegado e innegable homenaje al realizador de “Tiburón”.
Y es que en “Super 8” hay momentos que nos hacen recordar numerosos pasajes de otros tantos filmes con la indeleble huella del mago Spielberg. Cintas dirigidas por él como “ET”, “Tiburón”, “Encuentros en la Tercera Fase”, “1941” o “Parque Jurásico”. Y otras producidas por el creador Amblin: como “Gremlins”, “Los Goonies”, “Poltergeist”, “El secreto de la Pirámide”, “Harry y los Henderson” o “Aracnofobia”, por citar las más evidentes.
Hablamos de cine familiar, con pandilla de niños, bicicletas, un pequeño pueblo, fenómenos extraños, amistad, emoción, suspense y una buena dosis de algo casi perdido hoy por hoy: la magia cinematográfica bien apoyada en conseguidos efectos especiales. Elementos todos ellos presentes en la extensa filmografía del autor de “Indiana Jones”, sobre todo en la década de los ochenta, cuando sus películas aún no se habían hecho tan adultas como luego serían. Baste pensar en “La lista de Schindler” o “Munich”. Además, la que ahora nos ocupa es un película que rinde modesto tributo a todos aquellos que, como el mismísimo Spielberg, Tim Burton, David Fincher o el propio, J. J. Abrams, jugaban a ser cineastas con una cámara de “Super 8” en sus manos y la ayuda de cuantos amigos y familiares lograban embarcar.
Trascendiendo su vocación innatamente homenajeadora, y yendo al meollo crítico “Super 8” posee un emotivo prólogo que hace esperanzarse al cinéfilo, y una primera media hora de arranque poderosísimo que alcanza su cenit en la impactante secuencia del descarrilamiento y la desapariciones posteriores. Sin embargo, lo que sigue a continuación es un ostensible descenso de nivel a mediados de metraje, que desemboca en un tercer acto en la que todas las buenas ideas se diluyen, confunden, distorsionan y se mal desenlazan, precipitando la conclusión del filme a una colección de obviedades previsibles carentes de congruencia, lógica y calidad en comparación con los presupuestos iniciales del film.
No obstante, salvo esas erráticas postrimerías, “Super 8” es notoriamente disfrutable para todos aquellos que crecimos con “My Sharona” sonando en el walkman, o ensoñados con las películas que musicaron los ochenteros soundtracks de Goldsmith, Horner o Williams, a los que aquí el cada vez más maestro Michael Giacchino también homenajea con brillantez.
Por último, solo aconsejaros que prestéis atención, claro está, a la pandilla de críos protagonistas, algo que siempre Spielberg ha mimado en sus castings, pues ha gustado de contar sus historias con ojos de niño. Muchos de ellos darán que hablar. Destaco al protagonista, Joel Courtney; al pirotéctico Ryan Lee y a Elle Fanning, la chica por la que toda la panda bebe los vientos, que al igual que su hermana Dakota, está predestinada a comerse, literalmente, la pantalla.  

By Harry Callahan

7/10


TÍTULO ORIGINAL: “Super 8”
DATOS ADICIONALES: http://www.imdb.com/title/tt1650062/
SOBRE LA MÚSICA DEL PODCAST: http://www.jamendo.com/es/track/732498

sábado, 6 de agosto de 2011

"EL ORIGEN DEL PLANETA DE LOS SIMIOS": Muy eficaz precuela de una saga mítica

Tras ver “The Escapist”, una modesta pero efectiva cinta de fugas carcelarias, nada hacía presagiar que con este debut tras las cámaras, al inglés Rupert Wyatt le iba a caer en sus manos rodar nada menos que la película que cuenta el origen de “El planeta de los simios”.
Y es que la Fox, subida al carro de re-explotar viejas franquicias, series y todo aquello peliculable que pueda partir de una cierta familiaridad en el público y garantiza rentabilidad taquillera, ha decidido ahora poner en imágenes un nuevo episodio de la mítica saga que originara el siempre genial Franklin J. Schaffner a finales de los años 60 del pasado siglo.
Por suerte y supongo que escarmentados de lo vacua e innecesaria que resultó ser, hace una década, la experiencia burtoniana de hacer el engolado remake de la cinta original, la apuesta ahora, ha sido la de contar cómo los simios comenzaron a dominar una Tierra de la que los humanos pasaron a quedar casi extintos. 
Llegados a este punto, hay que recordar que, en no pocas ocasiones, y en lo que a la ciencia ficción se refiere, el acierto suele estar en la carencia de pretensiones y en partir de planteamientos, ante todo, lúdicos a los que se inyecta un tanto de moraleja existencial y un punto de cientifismo futurista, que otorguen cierto fuste e interés al producto. Pues bien, este es el concepto que guionistas, realizador y productores han adoptado a pies juntillas en “El origen del planeta de los simios”. 
En este sentido, la historia y el mensaje que se propone, pese a estar mil veces contado, sirve a la perfección para apoyar una puesta en escena tremendamente eficaz, con perfecto ritmo in crescendo y en la que se imbrican con envidiable acierto la imagen real y la digital. Además, el simio Cesar, bajo los rasgos actorales de Andy Serkis (el que fuera Golum en la trilogía “El Señor de los Anillos”), aparte de hacerse el amo de la trama, también lo hace de la película y la platea, reflejando, con el único apoyo del gesto, una evolución psicológica inobjetable, que ya quisieran para sí muchos protagonistas fílmicos dotados de voz y texto. 
Y es que, lo que más me gusta del filme de Rupert Wyatt es que trata de tú a tú al espectador, sin tangarle, sin hacer que comulgue con ruedas de molino y ofreciéndole algo tan sencillo como demasiadas veces proscrito de las salas de cine: el entretenimiento honesto, bien contado y mejor resuelto, en una cinta en la que cada dólar de un no excesivamente amplio presupuesto, está tan exprimido como ejemplarmente aprovechado.             

By Harry Callahan
7,5/10


TÍTULO ORIGINAL: Rise of the Planet of the Apes
SOBRE LA MÚSICA DEL PODCAST: http://www.jamendo.com/es/track/732501